martes, 16 de abril de 2013

OTRO PEDAZO DE HISTORIA DE I.R.A.

HISTORIA DE I.R.A.
Esta es una historia construida durante 28 años a ritmo de música punk cruda, es el diario de una banda escrito con perseverancia, a través de una experiencia netamente socio cultural que empezó como una consecuencia socio cultural en Medallo y hoy lleva 28 años en las calles.
Al inicio éramos cuatro integrantes, cada uno tenía una forma diferente de hacer vida e interpretar la música punk.  A mis 16 años,  ya tenía instintos de atracción hacia la música alternativa que llegaba del exterior, como el heavy metal y el metal, cuya base la generaron dos explosiones culturales en los años sesentas en Estados Unidos e Inglaterra.    La importación del punk nos indujo a tratar de hacer una música semejante, componíamos canciones con guitarras acústicas para protestar, debido a la época de pánico que estaba atravesando Medellín, donde las posibilidades de sobrevivir en la cultura eran nulas, pero con el poco talento y la sesgada información técnica que poseíamos, decidimos armar una banda influenciada por aquella música extranjera contenida en discos de vinilo y casetes, algo que era una aventura en ese tiempo de desilusión, un riesgo de muerte entre el fuego cruzado de aquella guerra, pero aún así gritábamos con desespero que no queríamos un país corrupto, ensangrentado y sin esperanzas.  Mis inicios en el canto fueron similares a los del guitarrista, el bajista y el batero, no éramos empíricos cien por ciento puesto que habíamos recibido nociones elementales de música, ese noventa y nueve por ciento de  empirismo salió a relucir cuando sonó el estartazo inicial de la banda, nadie nos produjo, ni nos enseñó a componer ese estilo de música que era adoptada en una ciudad muy tradicional, éramos auténticos, de garaje y no teníamos detrás ningún montaje, ni maquinarias, cada integrante caminaba las calles violentas a su manera y plasmaba en I.R.A. sus rabias y vivencias, así como el guitarra narraba sus agrestes momentos en letras y ritmos, el vocal escribía otras letras de aquellas que revelaban su contexto punk calle y el bajo y batero tenían su estilo propio.  Iniciamos en 1986 con un par de canciones propias de autoria de Jose P., Jose R. y Viola e hicimos varios covers, nuestro repertorio empezó a crecer y le agregamos  más canciones propias.  Los ensayos eran como pequeños conciertos, donde asistían muchos pelados del Poblado, ya que el guitarra formaba parte de una gallada de chiquillos problemáticos de dicho barrio y yo de vez en cuando, me parchaba con unos metaleros a escuchar grabadora en un lote baldío cerca de dicho barrio.
Me críe en Boston un barrio clase media cercano al centro y el primer bajista y cofundador, Jose R., también era del  mismo barrio, éramos dos adolescentes que por la cercanía de nuestras casas, resultamos conociéndonos y teniendo ese gusto común por el Rock, él estaba iniciando como bajista en un grupo de heavy conformado por sus compañeros de colegio y fue quien me enseño el mundo real de la música donde no solo era escuchar música extranjera, sino que también podíamos componer e interpretar la propia, de hecho me invito a un ensayo de su banda de Rock colegial y fue el primer ensayo de una banda local al que asistí, el sonido de ese ensayo jamás se me olvidara, me entro por un oído y no me salió por el otro, si no que se alojo en mi cerebro, luego dos de los integrantes de aquella banda armaron una banda de Metal a la cual bautizaron con el nombre de Astaroth donde Jose R. siguió, pero esta vez la guitarra, en la que yo compuse la letra de una canción llamada Aullido Sepulcral que hizo parte de su primer disco, en dicha banda de metal cantaba y tocaba el bajo Alejandro, hermano de Jose P. quien fue el primer guitarra, autor y compositor de muchos de los primeros temas y co – fundador de I.R.A. junto con Jose R. y yo, autor de algunas de esas mismas letras.  Conocí a Jose P. por medio de su hermano y nos caímos bien e intercambiamos música.  Yo pintaba murales y camisetas a mano con logotipos de bandas de metal y pinte las paredes de las piezas de los hermanos Lale y Jose P. y fue cuando entré en confianza con Jose P. y así formamos la banda donde él tocaría la guitarra, él formaba parte de una  gallada de jóvenes que siempre estaban en peleas callejeras, borracheras, necedades, pero sus almas y conciencias, hasta donde yo percibí, eran limpias, eran adolescentes enloquecidos por el sistema y hasta por los conflictos al interior de sus familias, además de todo la ciudad empezaba a tornarse muy violenta, sin posibilidades de vida tranquila para sus habitantes y por ende todos estabamos susceptibles.  Convinimos entre los tres: Jose R., Jose P. y yo (Viola) conformar la banda en 1.985, encontramos un prospecto de baterista que era amigo mío e iniciamos asi este cuarteto descontrolado, que luego en 1.986 se convertiría en I.R.A. y fue en esa primera fase cuando compusimos entre los tres, las primeras canciones en las que el guitarra y el Bajo se encargaban de la parte rítmica, le decíamos al baterista que hiciera tu – pa, tu – pa, tu - pa, yo con algunas ideas mías y de los otros integrantes, montaba las letras para que rimaran, pulía detalles de gramática y las acomodaba dentro de los ritmos, para eso mantenía un viejo cuaderno doblado y un lapicero en el bolsillo de mi chaqueta.  A los pocos días de iniciar la banda el guitarra sufrió un fuerte accidente automovilístico, meses después volvió al ruedo y no podía tocar bien la guitarra porque había perdido el centro de la visión y el brazo estaba lastimado aún, Jose R. y yo coincidimos que la tocada le podía servir de terapia y convinimos esperar hasta que se recuperara, al principio las cosas fueron muy duras porque Jose P. se desesperaba debido a que no podía tocar bien, pero poco a poco se fue normalizando.  La banda siguió en marcha, grabamos el primer disco y luego de la grabación la alineación de la banda cambió por primera vez.  Pasado un tiempo el primer bajista y co – fundador se había ido, pero el guitarra y yo continuamos y grabamos el segundo disco (1.991).  Yo era borracho, pero no me cagaba los toques y casi nunca me separaba de mi novia Monica, ella era muy sana, el guitarra tenía contacto con  sustancias prohibidas, cosa que a mí nunca me gustó y fue motivo para que tuviéramos fuertes diferencias, la tercera grabación que fue un Long Play, estuvo rodeada de mucho caos, algunos de los problemas internos de la banda, surgían porque cuando estábamos en algún show  nos pasábamos de licor, adicional el guitarra se drogaba, y a menudo perdía el ritmo,  la capacidad de tocar bien, sin importar si eran conciertos pequeños o grandes, entonces quedábamos todos en ridículo, cosa que me daban ganas de abandonar la banda, pero nunca tuve el valor de hacerlo, ya que I.R.A. corría por mi sangre.  Muchas veces le hice el reclamo de porque hacia esas cosas y nunca pude saberlo, puesto que volvía a pasar lo mismo y a los otros integrantes parecía no interesarles mucho. Esa imagen de punk destroy llamaba mucho la atención, algo parecido a los Sex Pistols, pero para mí en realidad eso no es el punk, no es por nada que ellos mismos se autodenominaban: la gran estafa del Rock´n roll.  
 Cumplidos los diez años, grabamos el primer C.D., y luego él guitarra se fue a vivir a U.S.A.  Mi novia que ya vocalizaba y yo seguimos con la banda a cuestas como siempre con ayuda de los amigos del eterno BATALLON, incluso Jose P. nos apoyaba desde U.S.A., como les digo, seguimos sin temor alguno y la logramos sacar de esa crisis de desaparición con un esfuerzo brutal.  Ahora vendrían dieciséis años de ardua actividad donde nos convencimos que debíamos trabajar seriamente y duro para confirmar qua amábamos la música por encima de muchas cosas, que valía la pena lo que estábamos haciendo y para seguir dándole a la ciudad más música y menos tragedia.  La alineación se consolido con Monica en la batería y voces, yo en la guitarra y voces y luego de Gabriel, Duvan en el bajo.
Con la nueva alineación, ahora en formato de trío y con más conciencia de la música que de la fiesta, decidimos alzar nuestros instrumentos, abordamos los medios de comunicación de una manera ingeniosa, para que la onda explosiva de nuestro sonido se expandiera, por medio de auto gestión grabamos y prensamos otros ocho C.D.s.  y un Long Play,  el hermoso camino de la independencia es el que siempre hemos recorrido y asi mismo realizamos más de diez video – clips de canciones propias y muchos otros de I.R.A. en vivo, un par de canciones son banda sonora de una película de cine, tenemos artículos en la Maximum Rock´n Roll (especializada a nivel mundial) y reseñas en las principales revistas y diarios del país al igual que en portales digitales, participamos en la realización de diez documentales e igual número de recopilaciones nacionales e internacionales, dirigimos casi veinte charlas y conversatorios culturales, escribimos y editamos dos libros, recibimos diferentes reconocimientos a nivel artístico, fuimos invitados especiales cuatro veces al festival Altavoz y base importante para su realización, también invitados dos veces a Rock al parque (de los más grandes en Latinoamérica) y a otros festivales a nivel nacional, hicimos cuatro giras por Estados Unidos donde tocamos tres veces en el legendario bar Neoyorkino CBGB donde nacieron los ramones y en el Gilman – Berkeley, San Francisco donde nació Rancid, también giramos por ocho países de Suramérica, tocamos en varios pueblos del departamento de Antioquia y en casi todos los departamentos de Colombia y repetidas veces en Bogotá (la capital), hemos compartido escenario con algunas de las bandas más representativas del punk a nivel mundial como Misfits, Reincidentes, Total Chaos, Garotos Podres, Suicidal Tendencies, The Casualties, Narcosis, Dos Minutos y otras, produjimos con TKG records la primera recopilación de bandas Punk de Medellín y Bogotá en C.D. inyectado, somos pioneros de las ferias de ventas de mercancía independiente en festivales y conciertos, participamos en conciertos a beneficio de damnificados de terremotos y hemos sido gestores de proyectos sociales como la Pogoton y Punk para un amigo, cuyo resultado fue la adquisición de dos casas para personas que no tenían y hasta hemos tocado en fiestas de quinceañeras, tomas callejeras, cumpleaños de abuelas y escuelas públicas, hemos visto como I.R.A hace parte de la historia cultural de Colombia y sabemos que muchas personas llevan una canción de IRA en el corazón.  
Esa es nuestra historia, continuamos aquí fieles a ella, seguramente ampliaremos estas páginas con muchas más anécdotas, creemos en el Punk consiente como forma de vida y en la cultura que nos lleva por los caminos de la paz.
A esto no le debemos llamar la verdadera historia de I.R.A., porque la verdad se caga de susto cuando siente los pasos de un BATALLON con 28 años de realidad.

2 comentarios:

  1. https://youtu.be/uzGW_Koljig PUNK ROCK

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  2. Comparto la historia, cuando a mis manos cayo un casseto grabado de un parcero Karroño que quiero resto de una banda llamada Ira. Parecía un ensayo, en un descontrol ruidoso que para el momento era muy apropiado. Luego los pude ver en tabogo, si no me falla el coco por el trocen abajo del cementerio central. Habíamos como unos doscientos pelagatos, la escena era preciosa muy autentica, punkis, metachos, rockers,rude boys, malabaristas,gente que le tramaba el sonido. De pronto veo un cresto acercarse Viola, nos pregunta que si andábamos juiciosos. Suena el sonido, empiezan a llegar mas crestudos, e inicia el baile, pogo, la danza del guerrero, todo el mundo coriando los temitas en un éxtasis inexplicable, como tomandose las vitaminas para el alma. Musica, parceros, guerreros, artistas, loquillos, que penetran en tu vida, canciones que cambian vidas, canciones que tienen recuerdos y marcan. Yo Yonise Moya llevo una canción de Ira tatuada en el corazón.

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